30.8.08

viento mío


"Mi voz buscaba el viento para tocar tu oido"


En salta agosto era ventoso. Había un decir entre los viejos para los cuales pasarlo era augurio de llegar a fin de año. Pero se sabe que los viejos viven esperando y escapando de la muerte.
Siempre me gustó esa idea de dejarle cosas al viento para que se las lleve, como el alma de los muertos. De chico me trepaba al paraíso de la vereda, buscaba la parte más alta de la copa, me ponía de cara al viento y lo dejaba que me peine. Mientras recitaba cosas. No importan la naturaleza de las cosas, lector atento. Asuntos míos con el viento.
Ya de trece o catorce años Neruda se despachó con ese verso en mi vida.
En estos dos últimos días de agosto en Buenos Aires el viento de mi niñez me ha buscado y me ha encontrado. Fresco, filtrador de sol me ha besado las canas. Yo no tuve otra que ir hasta el Obelisco para mostrarle la cara. Para abandonar cosas en él. Para ser yo otra vez.

1 comentario:

Math dijo...

y descubriste colores en el viento como Pocahontas?